“Nunca se es tan viejo”

Cuando la mayoría de la gente piensa en aquellos dedicados corredores de maratón, probablemente imaginan hombres y mujeres delgados más o menos de treinta años, o a las superestrellas de Kenia alcanzando marcas mundiales en la televisión. Para Cristina sin embargo, una persona de 55 años de edad, Administradora de un restaurante, la pasión por las carreras de larga distancia llegó mucho más tarde a su vida.

¿Cómo fue que terminaste siendo una maratonista a los 55 años?

Nunca he tenido un estilo de vida muy activo, y las horas que trabajo en el restaurant no me permiten tener un horario regular de ejercicios. Pero siempre me ha gustado ver maratones en la televisión, y siempre quise sentir esa sensación de logro. Empecé a correr cada vez que pude encontrar el tiempo, y poco a poco construí mi resistencia. Encontré algunos compañeros que también eran nuevos en las carreras, y nos animamos unos a otros para seguir adelante. A los 50 años, corrí mi primera maratón, y me he vuelto fanática desde ese entonces!

¿Qué te inspira a hacerlo?

Me inspira el sentimiento de logro cuando completo una carrera, cuando veo que hay recompensa por todas las horas de trabajo duro. También me inspiran los otros corredores que han comenzado a correr más tarde en su vida.

"¿Cuál sería tu “pequeño consejo”?

Nunca se es tan viejo, por lo tanto, no subestimes tu potencial.